La Tentación de Jesús

La Tentación de Jesús - Simbología E Interpretación

La Tentación de Jesús ocurre luego que fue bautizado al ser dirigido por el Espíritu al desierto, y ayunar por 40 días tuvo un enfrentamiento con satanás, quien quería tentarlo a dejar el propósito divino.

En este primer encuentro entre satanás y el Hijo de Dios fue la antesala de que sería el ministerio de poder de Jesús, ya que el maligno buscaba detener que se ejecutará la obra redentora, sin embargo de una forma Poderosa fue derrotado por Jesús.

Índice
  1. La Tentación de Jesús
  2. Simbología de La Tentación de Jesús
    1. Jesús fue llevado por el Espíritu
    2. Jesús se encontraba en el Desierto
    3. Tentación de Jesús

La Tentación de Jesús

La Tentación de Jesús

Cuando se hace el estudio sobre la tentación de Jesús se debe comprender que fue un evento que le dio el inicio el ministerio de Jesús, ya que luego que el Espíritu Santo se manifestará en forma de paloma fue bautizado, y recibió la aprobación de Dios, se levantó el enemigo en contra del propósito divino.

En este sentido satanás buscaba la forma de detener a Jesús en el plan que se había establecido para traer liberación a la humanidad, y es por eso que se le aparece mientras estaba en ayuno en el desierto y sentía hambre, por lo que él quiso engañarlo así como lo hizo con Eva y Adán en el Edén, sin embargo Jesús con su sabiduría pudo derrotarlo.

«Y Jesús, lleno del Espíritu Santo, volvió del Jordán, y fue llevado por el Espíritu al desierto por cuarenta días, y era tentado por el diablo. Y no comió nada en aquellos días, pasados los cuales, tuvo hambre. Entonces el diablo le dijo: Si eres Hijo de Dios, dile a esta piedra que se convierta en pan.

Jesús respondiéndole, dijo: Escrito está: No sólo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra de Dios. Y le llevó el diablo a un alto monte, y le mostró en un momento todos los reinos de la tierra. Y le dijo el diablo: A ti te daré toda esta potestad, y la gloria de ellos; porque a mí me ha sido entregada, y a quien quiero la doy: Si tu postrado me adorares, todos serán tuyos.

Respondiendo Jesús, le dijo: Vete de mí, Satanás, porque escrito está: Al Señor tu Dios adorarás, y a él solo servirás. Y le llevó a Jerusalén, y puso sobre el pináculo del templo, y le dijo: Si eres Hijo de Dios, échate de aquí abajo; porque escrito está: A sus ángeles mandará acerca de ti, que te guarden;

Y en las manos te sostendrán, para que no tropieces con tu pie en piedra. Respondiendo Jesús, le dijo: Dicho está: No tentarás al Señor tu Dios. Y cuando el diablo hubo acabado toda tentación, se apartó de él por un tiempo» (Lucas 4:1-13)

A pesar que la cita bíblica habla de forma específica sobre la tentación de Jesús debe entenderse que ese fue el primer combate entre el Hijo de Dios contra satanás, quien pretendía desviar a Jesús del propósito, y detener la salvación que Dios había determinado para toda su creación.

Del mismo modo, Jesús de una forma contundente derrotó a satanás, quien buscando seducirlo le mostró reinos, poder y toda la obra en el que se pudiese posicionar como mayor a los demás, pero no pudo vencerlo. Satanás buscaba la misma estrategia que usó con Eva para que ella comiera del fruto, sin embargo Jesús lleno del Espíritu le respondió basado en lo que las Sagradas Escrituras dice.

Llevándola al plano actual este encuentro que tuvo Jesús con satanás es lo mismo que vive el creyente, ya que producto de los placeres que rodea el mundo busca seducir a las personas para que pequen, y de esa manera perderse en el camino para no cumplir el propósito por el cual han sido llamados en la tierra, y de ese modo perder la salvación eterna.

Esto quiere decir que es la confirmación de la lucha espiritual que vive de forma diaria el creyente, ya que de forma progresiva es tentado por satanás, quien desea que se pierda pero con su fe viene a ser aprobado, al frente de esos placeres que los rodean por lo que hay que tomar ese ejemplo que tuvo Jesús frente al enemigo.

«Por lo demás, hermanos míos, fortaleceos en el Señor, y en el poder de su fuerza. Vestíos de toda la armadura de Dios, para que podáis estar firmes contra las asechanzas del diablo. Porque no tenemos lucha contra sangre y carne,

sino contra principados, contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes. Por tanto, tomad toda la armadura de Dios, para que podáis resistir en el día malo, y habiendo acabado todo, estar firmes» (Efesios 6:10-13) 

Simbología de La Tentación de Jesús

Simbología de La Tentación de Jesús

El evento suscitado en el desierto entre Jesús y satanás tiene varias variantes que son dignas de análisis, para que el creyente pueda desarrollar sus fe y comprender como vencer la tentación así como lo hizo Jesús.

Jesús fue llevado por el Espíritu

Lo primero que se debe saber es que al iniciar la narración de este evento habla que Jesús fue dirigido por el Espíritu, quien lo llevó al desierto luegoque fue bautizado, es decir después de estar revestido por la presencia de Dios vino el enfrentamiento contra satanás.

«Y Jesús, lleno del Espíritu Santo, volvió del Jordán, y fue llevado por el Espíritu al desierto por cuarenta días»

Esto se refiere a que Jesús en su obediencia entendía a lo que Dios había designado para su vida, ya que cuando se revisa cada uno de los textos del evangelio hablan como era su obediencia perfecta, pues en Marcos dice "Y luego el Espíritu le impulsó al desierto" o en el libro de Lucas "era conducido" cada uno de ellos hace el énfasis en que Dios se movió por obediencia.

Cada una de estas citas bíblicas habla sobre como Jesús movido por el Espíritu Santo, nunca se opuso, ni se resistió a lo que le indicaba, sino que se opuso a los impulsos humanos permitiendo que la voluntad del Padre se ejecutará en su vida, y en cada momento que puedo caminar en su ministerio.

De esto se puede entender que todo era un entrenamiento que estaba recibiendo el mismo Jesús, ya que Él estaba cumpliendo 40 días de ayuno donde era lleno de la presencia de Dios fortaleciendo su espíritu, haciendo morir la carne, por lo que fue aprobado cuando se enfrentó a satanás, a quien pudo vencer de forma contundente.

Jesús se encontraba en el Desierto

Jesús se encontraba en el desierto mientras ayunaba y ese lugar representa un lugar con precariedad, apartado, inhóspito, donde no se encontraban personas, donde no podría recibir ayuda humana cuando se enfrentó a satanás

Es importante entender que este evento sucede en el desierto un lugar en el que podría ser seducido, ya que al estar en un lugar en precariedad, inhóspito y sin ningún tipo de posibilidad de bienestar humano, lo llevaría a sucumbir al no ser sostenido por Dios

Se puede decir que Jesús le da una lección a todos los creyentes al mostrar lo importante que debe ser tener una comunión íntima con Dios, que le permitiría vencer cada una de las tentaciones y ataques del enemigo, y poder mantenerse fieles a Dios, pues recibirá siempre la ayuda del Padre Celestial.

Esto es una enseñanza que todo creyente debe tomar para permanecer en conexión con Dios, ya que Jesús luego de ser bautizado y revestido por el Espíritu Santo estuvo en ayuno por 40 días y en el desierto fue tentado, pero venciendo con honores por su obediencia y conexión al cielo.

Tentación de Jesús

Cuando Jesús se encontraba en el desierto y se le aparece satanás, este buscaba a que Él deshonrara al Padre Celestial e incumpliera todo lo que estaba escrito en las Sagradas Escrituras, sin embargo de una forma sabia Jesús avergonzó al enemigo a través de la palabra de Dios.

«Y no comió nada en aquellos días, pasados los cuales, tuvo hambre. Entonces el diablo le dijo: Si eres Hijo de Dios, dile a esta piedra que se convierta en pan»

Satanás le daba esas sugerencias a Jesús, pues pretendía que se manifestará la autoridad que tenía el como Hijo de Dios, ya que fácilmente podría convertir todas las cosas según su propósito y conveniencia, pero Jesús no se dejó influenciar a faltar la Palabra de Dios.

«Jesús respondiéndole, dijo: Escrito está: No sólo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra de Dios»

De este modo, Jesús demuestra que para ser el Salvador de la humanidad tenía que estar bajo los mismos términos que cualquier persona, sin usar ningún tipo de poder para su beneficio, esto quiere decir que Él tenía limitaciones igual que culquiera y mostró su dependencia a la Palabra de Dios, aunque eso produciera pasar hambre.

Con la respuesta que Jesús le daba a satanás y al verse este derrotado prosiguió buscando la forma de tentarlo, de modo que lo llevó a que estableciera su reino en este mundo, de una forma diferente a la que se quería establecer según el plan divino.

Tentación de Jesús de satanás

«Y le llevó el diablo a un alto monte, y le mostró en un momento todos los reinos de la tierra. Y le dijo el diablo: A ti te daré toda esta potestad, y la gloria de ellos; porque a mí me ha sido entregada, y a quien quiero la doy: Si tu postrado me adorares, todos serán tuyos»

La sugerencia de satanás era ofrecerle un gobierno de todos los reinos del mundo a cambio de su adoración, estaba buscando que se le reconociera la autoridad en este mundo, por lo que de forma contundente Jesús le respondió a través de lo escrito en las Sagradas Escrituras, determinando a quien debían adorar.

«Respondiendo Jesús, le dijo: Vete de mí, Satanás, porque escrito está: Al Señor tu Dios adorarás, y a él solo servirás»

Con esta respuesta Jesús demostraba que tenía dominio absoluto de las escrituras, ya que Él entendía que era por medio de ella que podría vencer al diablo, pues de ese modo estaba mostrando el dominio total del reino de los cielos.

Sin embargo, a pesar de ello satanás proseguía con el plan de tentar a Jesús queriendo desacreditar la autoridad divina, y de esa forma que Jesús manifestara la divinidad ante las circunstancias que estaban presentando en ese momento.

«Y le llevó a Jerusalén, y puso sobre el pináculo del templo, y le dijo: Si eres Hijo de Dios, échate de aquí abajo; porque escrito está: A sus ángeles mandará acerca de ti, que te guarden. Y en las manos te sostendrán, para que no tropieces con tu pie en piedra»

Con la astucia de satanás pretendía que Jesús cometiera algún tipo de influencia, pero Jesús lo vencía de una manera contundente con cada respuesta que le daba, pues no satisfacía ninguna de las peticiones, sino que él le mostraba el mandato establecido por Dios con su palabra.

«Respondiendo Jesús, le dijo: Dicho está: No tentarás al Señor tu Dios. Y cuando el diablo hubo acabado toda tentación, se apartó de él por un tiempo»

Antes las contundentes respuestas que daba Jesús satanás tuvo que huir, ya que no pudo doblegar al Señor, quien demostró su dependencia a Dios y se comportó como un hombre íntegro, perfecto, que no cedía ante las tentaciones que le ofrecía el maligno, sino que demostraba que él era el hijo de Dios.

Se puede culminar diciendo que la tentación de Jesús se convierte en un ejemplo a seguir para todo hombre, que de forma constante tiene una lucha espiritual, y se puede vencer a través de la enseñanza divina

Es por ello que le invitamos a que le pida revelación al Espíritu Santo de Dios, para que le sea revelada en su vida las Sagradas Escrituras y poder crecer en lo espiritual para vencer las tentaciones de este mundo.

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