Dones De Revelación: Un Estudio Sobre Los Dones De Profecía, Revelación Y Discernimiento

Los dones de revelación tienen una gran importancia en el cristianismo. Estos dones recibidos por el Espíritu Santo son mencionados en varias partes de la Biblia, como 1 Corintios 12:4-11. En este pasaje se identifican claramente los tres dones de profecía, revelación y discernimiento. Si bien estos dones se relacionan entre sí, cada uno tiene su propia función dentro del contexto cristiano.

Profecía

La profecía es un regalo dado por el Espíritu Santo a los cristianos para hablar por parte de Dios. Esta forma de hablar y de comunicarse puede conocerse como la palabra de Dios. La profecía no siempre necesariamente simplemente predecir el futuro, sino también edificar, confirmar y exhortar espiritualmente a otros.

Revelación

La revelación es el proceso por el que el Espíritu Santo da un mensaje directo a una persona o a un grupo de personas. Esta revelación puede variar desde una comprensión espiritual sencilla hasta una revelación profética compleja. Estos mensajes de revelación generalmente se reciben después de un período de oración y meditación, y a menudo proporcionan orientación para una situación determinada.

Discernimiento

El discernimiento es el don de ser capaz de diferenciar entre lo bueno y lo malo. Esto incluye la habilidad de saber cuáles son los principios bíblicos correctos para una situación determinada. El discernimiento también permite distinguir entre aquellas voces que provienen de Dios y aquellas ideas y acontecimientos que provienen de otros orígenes.

Los dones de profecía, revelación y discernimiento son importantes para los cristianos ya que nos permiten hablar y escuchar a Dios mejor, además de ayudarnos a distinguir entre aquellas cosas que vienen de Él y aquellas que no. Estos dones nos ayudan a ver y entender las cosas que Dios quiere de nosotros y, a la vez, a encaminarnos de la mejor manera hacia Su voluntad.

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¿Cuáles son los dones de revelación?

Los dones de revelación son aquellos regalos del Espíritu Santo dados a la iglesia para ayudar a comprender la voluntad de Dios, así como también para conocer, declarar y aplicar Su Palabra. Estos dones, que no se han de confundir con los carismas, están presentes en el libro de 1 Corintios capítulo 12 versículos 8 al 10.

Para entendermos mejor usaremos como guía las viñetas que se mencionan aquí:

• Palabra de sabiduría - Esto consiste en un conocimiento excepcional que la persona posee respecto a algún tema específico y que, mediante la revelación de Dios, recibe con la ayuda del Espíritu Santo.

• Palabra de conocimiento - Se refiere a una revelación directa de la parte de Dios, en la que pueden manifestarse claramente los grandes misterios divinos, así como también los secretos más profundos que El desea revelar.

• Profecía - Consiste en emitir palabras de parte de Dios, tanto personales como generales, con el fin de exhortar, edificar y corregir a la iglesia.

• Lenguas - Por medio de las lenguas, el Espíritu Santo permite a los creyentes manifestar lo que hay en el corazón sin necesidad de recurrir al lenguaje humano.

• Interpretación de lenguas - Esta es la capacidad que se da a algunos creyentes para interpretar aquellas lenguas que han sido dadas oficialmente por el Espíritu Santo.

Como vemos, existen varios dones de revelación y son dados por el Espíritu Santo con el propósito de guiarnos a conocer mejor la voluntad de Dios para nuestras vidas.

¿Cuáles son los 7 dones que habla la Biblia?

Los 7 dones que habla la Biblia son los siguientes:

• Don de Profecía: El don de la profecía se refiere a la capacidad dada por el Espíritu Santo que permite recibir y transmitir palabras inspiradas por Dios para la edificación de la iglesia.
• Don de Servicio: El don de servicio se refiere a la capacidad dada por el Espíritu Santo para servir fidelmente a Dios, a la iglesia y a la comunidad.
• Don de Enseñanza: El don de enseñanza se refiere a la capacidad dada por el Espíritu Santo para transmitir conocimientos útiles relacionados con la fe cristiana.
• Don de Exhortación: El don de exhortación se refiere a la capacidad dada por el Espíritu Santo para animar y estimular a los demás con guía bíblica.
• Don de administración: El don de administración se refiere a la capacidad dada por el Espíritu Santo para organizar y dirigir proyectos de forma eficaz.
• Don de Evidencias: El don de evidencias se refiere a la capacidad dada por el Espíritu Santo para mostrar doctrinas cristianas claramente.
• Don de Curación: El don de curación se refiere a la capacidad dada por el Espíritu Santo para sanar físicamente a los demás con oraciones.

Como vemos, estos dones del Espíritu Santo nos recuerdan que Dios está presente a través de su Palabra y obra constantemente en nuestras vidas para ayudarnos de muchas maneras. Su presencia nos da esperanza, fortaleza y consuelo para llevar una vida de acuerdo a sus principios y compartirlos con otros.

¿Cuáles son los 9 dones de la Biblia?

Los nueve dones de la Biblia son también conocidos como los “Dones del Espíritu Santo” y son mencionados en varios pasajes bíblicos tales como: 1 Corintios 12:4-11; Romanos 12:6-8; Efesios 4:11. Estos dones fueron dados a los cristianos como una manifestación del Espíritu Santo para compartir con otros. Estos dones son:

• Profecía: Capacidad para profetizar acerca de eventos futuros, así como recibir e interpretar mensajes de Dios para compartir con otras personas.
• Milagros: Facultad para realizar milagros de forma sobrenatural, los cuales sirven como una señal de la presencia de Dios.
• Dones de sanidad: Capacidad para sanar a otros a través de la fe en Dios y el poder que Dios les da.
• Lenguas: El hablar en lenguas es un don que permite al individuo orar y alabar a Dios en lenguas desconocidas.
• Interpretación de lenguas: Capacidad para interpretar a aquellos que hablan lenguas extrañas.
• Discernimiento: Permitir al individuo percibir lo que el Espíritu Santo está haciendo a través de las circunstancias y los acontecimientos.
• Don de consejo: Facultad para dar consejo sabio a otros yes una manera de compartir el conocimiento que Dios le ha dado.
• Enseñanza: Capacidad para entender e interpretar la Palabra de Dios y compartirla con otros.
• Auxilio: Esta facultad permite preparar al individuo para ayudar a otros mediante la provisión de necesidades materiales.

El hecho de que hayamos recibido los dones del Espíritu Santo nos anima a seguir la voluntad de Dios con amor, confianza y fidelidad. Estos dones nos muestran cuanto nos ama Dios y como nos apoya. Que demos gracias a Dios por estos dones cada día de nuestras vidas.

¿Cuál es el don del discernimiento?

El don del discernimiento es una de las mayores bendiciones que Dios nos ofrece, y significa la capacidad de entender algo profundamente y diferenciar con claridad entre lo bueno y lo malo. Esta habilidad nos ayuda a discerner entre aquellas cosas que vienen de Dios y aquellas que son invenciones del hombre.

Es una habilidad obtenida por el Espíritu Santo, que se nos regala cuando decidimos seguir a Cristo (1 Corintios 12:10). El discernimiento nos ayuda a ver las cosas tal cual son, con precisión e inteligencia divina, así nos permite conocer la verdad en situaciones difíciles y comprender todo aquello que podríamos no entender con nuestra lógica humana. De hecho, el don del discernimiento nos da la capacidad para desarrollar un criterio moral íntegro, para actuar según lo que Dios nos dice y para reconocer cuándo nos estamos alejando de Él.

Llevar una vida discernida implica atención y humildad, y también reconocer que el Señor siempre tiene el control y su Palabra es la mayor guía que podemos tener. Esta condición nos ayudará a darnos cuenta cuándo estamos cayendo en actitudes pecaminosas o cuando estamos descuidando nuestra relación con nuestro Salvador.

Es normal equivocarnos y necesitamos usar el discernimiento para poder corregirnos. Mediante este don, Jesús nos invita a permanecer atentos permanentemente, para que nos sea posible fijar nuestro corazón en Él. Algunas de las características del discernimiento son:

• Amar la verdad y estar dispuestos a aceptarla
• Ser intuitivos respecto a la presencia de Dios
• Tener el valor de ser honestos con nosotros mismos y con los demás
• Aprender a distinguir entre la verdad y la mentira
• Profundizar nuestra fe y conocimiento de la Palabra de Dios

Al obedecer los planes de Dios para nuestras vidas, este don nos dará la sabiduría que necesitamos para ser obedientes. La Palabra nos dice que seremos capaces de distinguir entre lo que es recto y lo que es malo, entre lo que se considera astuto y lo que es ingenuo (Hebreos 5:14). Por lo tanto, es fundamental para nosotros buscar el don de discernimiento para avanzar como seguidores de Cristo.

Preguntas Relacionadas

¿Cómo la Biblia define los dones de profecía, revelación y discernimiento?

La Biblia ofrece una variedad de dones únicos a aquellos que están llamados por Dios. Estos dones especiales se reflejan en la profecía, la revelación y el discernimiento, que son los temas cruciales de este artículo.

Profeccía: La Biblia define la profecía como un tipo de don divinamente inspirado para hablar y anunciar mensajes de parte de Dios. El lenguaje utilizado para la profecía es el lenguaje simbólico. Esta profecía puede significar que una persona tenga visiones o palabras para comunicar en nombre de Dios. Estos mensajes se refieren principalmente al futuro, pero también pueden mencionar el presente o el pasado para mostrar el trabajo de Dios o su dirección. Los profetas son importantes en la vida de la iglesia cristiana para obtener consejo y comprender la voluntad de Dios en las situaciones personales y comunitarias.

Revelación: La Biblia define la revelación como un don especial del Espíritu Santo. La revelación es una comunicación directa con Dios, donde el lenguaje con el que se expresa es comprendido por aquellos que reciben el mensaje. Esta revelación se refiere principalmente al futuro, pero también puede referirse al presente o al pasado para mostrar el plan de Dios o su dirección. Los profetas son importantes en la vida de la iglesia cristiana para obtener consejo y comprender la voluntad de Dios en las situaciones personales y comunitarias.

Discernimiento: La Biblia define el discernimiento como un don espiritual para distinguir entre el bien y el mal, entre lo verdadero y lo falso. Esto nos ayuda a entender el conocimiento espiritual y a discernir las opiniones humanas de la verdad de Dios. El discernimiento es un don de uno mismo para entender el propósito de Dios en una situación en particular. El discernimiento nos permite medir nuestras acciones para que estén de acuerdo con la voluntad de Dios.

En resumen, los dones de profecía, revelación y discernimiento definidos en la Biblia son:

• Profeccía: Un tipo de don divinamente inspirado para hablar y anunciar mensajes de parte de Dios.
• Revelación: Una comunicación directa con Dios, donde el lenguaje con el que se expresa es comprendido por aquellos que reciben el mensaje.
• Discernimiento: Un don espiritual para distinguir entre el bien y el mal, entre lo verdadero y lo falso.

Los cristianos debemos orar para que Dios nos guíe a través de estos dones y nos ayude a entender su propósito y su voluntad. Que Él nos conceda los dones de profecía, revelación y discernimiento para acercarnos más a él.

¿Cuáles son algunos de los principales ejemplos bíblicos de estos dones?

Los dones espirituales nos son dados para equiparnos en la vida cristiana y así poder servir a Dios y al prójimo. Estos dones se mencionan en varias partes de la Biblia y hay distintos tipos, pero los principales según el Nuevo Testamento son:

• El Don de liderazgo o Gobierno: Este don provee al individuo con el poder para dirigir el cuerpo de Cristo. Se puede encontrar en Romanos 12:8 "Así que quien promueve el amor, promueve el bien."
• El Don de enseñanzar o Maestro: Este don es dado para ayudar a los demás miembros de la iglesia a entender y aprender los principios bíblicos. Se puede encontrar en 1 Timoteo 3:2 "Un anciano debe ser irreprensible, marido de una sola mujer, sobrio, prudente, decente, hospitalario, capaz de enseñar".
• El Don de Exhortación: Este don se refiere a animar y animar a otros a una mejor santidad, basándose en la Palabra de Dios. Se puede ver en 1 Corintios 14:3 "Pero el que profetice hable a los demás para edificación, exhortación, y consolación."
• El Don de Servicio o Ministerio: Este don se refiere a aquellos que tienen una habilidad para servir a la iglesia con diligencia y para el bienestar de la misma. Se puede ver en Hebreos 6:10 “Y Dios no es injusto para olvidar vuestra obra y el trabajo de amor que habéis mostrado hacia su nombre, habiendo servido a los santos.”
• El Don de Hablar en Lenguas: Este don se refiere a la habilidad para hablar en idiomas desconocidos. Se encuentra en Hechos 2:4 "Y todos ellos estaban llenos del Espíritu Santo y comenzaron a hablar en otras lenguas, según el Espíritu les daba que hablasen".
• El Don de Sanidades: Este don se refiere a la habilidad de Dios de sanar a los enfermos y liberarlos de la enfermedad. Se ve en Marcos 16:18 "Y ellos, imponiéndoles las manos, los recibían sanos".

Estos son algunos de los principales dones bíblicos que nos enseña la Palabra de Dios. Usando estos dones de manera adecuada, podemos servir mejor a Dios y al prójimo, apostando al Reino de Dios.

¿Cómo puede una persona discernir si alguien tiene algún don de profecía u otro don de revelación?

En la Biblia encontramos varios ejemplos de personas dotadas de dones proféticos y del Espíritu Santo. ¿Cómo puede una persona discernir si alguien tiene un don de profecía? La Escritura nos da un marco para evaluar lo que consideramos como dones o talentos sobrenaturales. Esto incluye la profecía, el consejo, la sanación y otros diferentes dones que se mencionan en la Biblia. Aquí hay algunos de los principios bíblicos para discernir si alguien tiene dones de revelación como la profecía:

• Discernimiento: La Escritura indica que hay personas que están bien dotadas con dones de discernimiento. Estas personas tienen el don de saber cuando un mensaje o una profecía es realmente de Dios o no lo es. Esta habilidad es clave para discernir si alguien está usando dones de profecía legítimamente.
• Verificación: Cuando alguien profetiza, debemos verificarlo. Si la profecía se ha cumplido, entonces es mucho más probable que se trate de un verdadero don de profecía. Si algo se predijo y no llega a cumplirse, es posible que hayamos estado equivocados acerca del don.
• Confirmación: Siempre es bueno que haya otras personas para corroborar una profecía dada. Si alguien recibe una palabra de revelación en privado, es importante compartirla con otros cristianos maduros y ver qué confirman. Esto nos permitirá tener un mejor discernimiento de la palabra y descubrir si hay algo que debamos creer o desechar.

Además de los principios bíblicos, hay otros factores que nos ayudan a determinar si alguien está usando legítimamente un don de revelación. Por ejemplo, una persona que usa sus dones para obtener una ganancia personal, buscar elogios o controlar a los demás, probablemente no esté usando un don de profecía correctamente. También es importante recordar que los dones proféticos son para edificar y exhortar a los demás, nunca para predecir el futuro ni para imponer nuestras propias opiniones sobre los demás.

En conclusión, usar los principios bíblicos y la discreción sana para determinar si alguien está usando un don de profecía u otro don de revelación correctamente es la manera correcta de vivir nuestra fe cristiana. Si algo no encaja con la Escritura o simplemente no respeta a los demás, no debemos aceptarlo. Escuchemos lo que dice la Biblia y busquemos su dirección para discernir quién tiene un don de profecía o cualquier otro don sobrenatural.

¿Cómo saber si Dios nos está hablando a través de un don de revelación?

Es importante entender y reconocer que Dios nos habla a través de un don de revelación. Puede ser que no logremos entenderlo de inmediato, pero si investigamos buscando respuestas, entonces Dios puede darnos luz para orientarnos. Algunas señales que harían que sepamos que Dios nos está hablando son:

• Si al recibir la palabra nos sentimos alentados.

• Si encontramos respuestas a nuestras preguntas.

• Si alguien dice algo que profundiza nuestra fe.

• Si esa misma palabra es compartida por personas creyentes.

• Si se usa versículos bíblicos para fundamentar lo dicho.

También cuando los pensamientos que recibimos provienen de Dios, no es algo que surja por nuestro propio deseo sino que es una inspiración que llega. Se pueden distinguir diferencias entre un pensamiento nuestro y uno que proviene de Dios. Otro factor es la consistencia con la Palabra de Dios, sabemos que los dones de revelación son como una luz o un destello, que debemos recibirlo como un regalo divino. Es importante verificar si lo que hemos recibido es consistente con la palabra de Dios, si dicho mensaje está enviado para nuestro bien.

Por último, hay que tener en cuenta que el don de revelación es para ayudar y edificar a la Iglesia, por lo tanto debe ser compartido con la comunidad cristiana - para que otros tengan un conocimiento más profundo del amor y los propósitos de Dios. Así, cuando recibamos un don de revelación, es necesario estar preparados para recibir lo que Dios nos tenga que decir y después compartir ese mensaje con toda la comunidad de fe.

¿Cuáles son los beneficios de tener estos dones de revelación en nuestras vidas?

Los dones de revelación son aquellos regalos dados por Dios a las personas para ayudarlos a guiar su vida. Estos incluyen entendimiento, discreción, sabiduría y conocimiento. A través de estos dones, la persona obtiene una comprensión profunda y profética en cualquier contexto.

Algunos de los principales beneficios de tener estos dones de revelación en nuestras vidas son:

• Perspectiva Profética: Con los dones de revelación, somos capaces de ver la vida desde un punto de vista más profundo. Esto nos ayuda a reconocer el propósito y el plan de Dios para nosotros.
• Dirección Divina: Estos dones nos ayudan a discernir lo que Dios quiere para nosotros en determinados momentos y situaciones de la vida. Nos permite tener una clara guía mientras caminamos en fe.
• Entendimiento Sobrenatural: En ciertos momentos, es posible que tengamos una comprensión increíble de situaciones o circunstancias, incluso antes de que sucedan. Esto es un regalo divino para ayudarnos a descifrar los planes de Dios.

Además de esto, estos dones nos ofrecen la oportunidad de ayudar a otros mientras caminamos en la luz de Cristo. Estos dones nos permiten dar una dirección sabia, inspiradora y profética para los demás. Finalmente, estos dones nos permiten abrirnos y recibir la gracia de Dios. La ley de Dios es perfecta, pero Dios nos da sus dones de revelación para que podamos entender la profundidad de Su amor y bondad con nosotros.

Conclusión

En conclusión, podemos afirmar que los dones de revelación son un tema profundo y complejo que los cristianos deben entender para llegar a la verdad. Estos dones, como la profecía, la revelación y el discernimiento, fueron dados por Dios para uso libre de sus hijos. Los dones de revelación sirven para guiar y fortalecer al creyente en su camino de seguir a Jesús.

Si bien estos dones requieren de mucha sabiduría, también nos alientan a ser conscientes de la presencia de Dios en nuestras vidas. Debemos recordar que estos dones deben usarse para edificar a la iglesia, no para malgastar nuestro tiempo, energía y talento especulando en ellos. Es importante también recordar que debemos confiar y buscar al Espíritu Santo para guiarnos en el uso de estos dones.

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