Mas Buscad Primeramente el Reino de Dios y su Justicia

Mas Buscad Primeramente El Reino De Dios Y Su Justicia

Mas Buscad Primeramente el Reino de Dios y su justicia es una de las enseñanzas que Jesús dejó para todos aquellos que desean recibir la bendición del Padre Celestial, y dejar a un lado el afán y enfocarse en conocer el dador de todas las cosas.

Esta enseñanza busca moldear la vida de las personas a la voluntad de Dios, y que puedan tener la confianza en Él, quien cuida de cada uno de los que buscan de su presencia, es hacer entender la importancia de guardar los mandamientos para obtener las promesas dadas por Dios.

Índice
  1. Mas Buscad Primeramente el Reino de Dios y su Justicia
  2. Análisis de la frase: "Mas Buscad Primeramente el Reino de Dios y su Justicia"
    1. Buscar Primeramente
    2. El Reino de Dios
    3. Y su Justicia
    4. Y todas estas cosas os serán añadidas
  3. Cómo acercarse al Reino de Dios y su Justicia

Mas Buscad Primeramente el Reino de Dios y su Justicia

Mas Buscad Primeramente el Reino de Dios y su Justicia

Esta frase dicha por Jesús "Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia" viene a darse luego que Él enseña sobre el afán diario que vivían los oyentes, de esa forma contextualizada el hecho que le daban más importancia a las cosas vanas, que a las espirituales.

«Por tanto os digo: No os afanéis por vuestra vida, qué habéis de comer o qué habéis de beber; ni por vuestro cuerpo, qué habéis de vestir. ¿No es la vida más que el alimento, y el cuerpo más que el vestido?

No os afanéis, pues, diciendo: ¿Qué comeremos, o qué beberemos, o qué vestiremos? Porque los gentiles buscan todas estas cosas; pero vuestro Padre celestial sabe que tenéis necesidad de todas estas cosas.

Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas. Así que, no os afanéis por el día de mañana, porque el día de mañana traerá su afán. Basta a cada día su propio mal» (Mateo 6:25,31-34)

De este modo, Jesús enseñaba a todos sus oyentes que Dios tiene grandes promesas espirituales, pero también tiene promesas para la vida en la vida en la tierra, y Dios tiene cuidado de darle cumplimiento a suplir esas necesidades.

Jesús quería que las personas entendieran que Dios tiene control de su vida, y debían ajustarse a su voluntad, Él enseñaba a que conocieran a Dios en todo su esplendor, para poder descansar sobre las cosas que necesitaban.

Y es en este sentido es que surge esta frase "mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia" guiándolos en ir a conocer la fuente de todas las añadiduras, y poder encontrar al Dios ayudador, quien nunca los dejaría.

Análisis de la frase: "Mas Buscad Primeramente el Reino de Dios y su Justicia"

Mas Buscad Primeramente el Reino de Dios y su Justicia

La frase dada por Jesús "Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia" tiene una profundidad que necesita ser estudiada, es por ello que a continuación se explicará cada uno de los términos presentados en esta conocida frase.

Buscar Primeramente

Cuando se estudia la palabra "Buscar" esta significa ir en pros de algo, procurar encontrar algo, preocuparse ante una situación, poner la atención algo, querer responder a algo, esto quiere decir que Jesús al enfatizar en buscar, es un término de accionar a dar encuentro algo.

Mientras la palabra primeramente tiene el significado de colocar algo en primer lugar, poner algo de primero en la lista, establecer prioridad, determinar su importancia sobre algo, de este modo Jesús deseaba que todos los oyentes comprendieran la prioridad de encontrar esa fuente de bendición.

Jesús le está haciendo una invitación al creyente, para que se preocupe, busque, procure, ponga su atención primaria en las cosas de Dios, y cumpla su voluntad en vez de estar afanado en procurar conseguir las cosas materiales que necesita.

«Por tanto os digo: No os afanéis por vuestra vida, qué habéis de comer o qué habéis de beber; ni por vuestro cuerpo, qué habéis de vestir. ¿No es la vida más que el alimento, y el cuerpo más que el vestido?»

Jesús quiere que cambien ese hábito, que dejen de estar preocupado por las cosas materiales, que muchas veces se convierten en ídolos para su vida, y cambian el primer lugar de Dios.

«Si, pues, habéis resucitado con Cristo, buscad las cosas de arriba, donde está Cristo sentado a la diestra de Dios. Poned la mira en las cosas de arriba, no en las de la tierra» (Colosenses 3:1-2)

El Reino de Dios

El término reino de Dios es presentado a través de Jesús y su enseñanza, ya que puede se puede ver como hacía referencia del reino de los cielos o reino de Dios creando esa implicación divina, de lugar donde se encuentra el Padre Celestial.

Al comprender sobre ese reino al que se refiere Jesús se debe hacer énfasis en que cualquier reino tiene un rey, y es por ello que aparece la figura de Jesús, pues él sería el Rey de Reyes quien permitiría traer el reino a la vida terrenal, en el aspecto espiritual.

En este sentido, se habla que el reino de Dios está cimentado en la justicia que demostraba Jesús ante los demás, es un poder donde se encuentra el gozo, la paz, y la presencia de Dios manifestada en las vidas.

«Porque el Reino de Dios no es comida ni bebida, sino justicia, paz y gozo en el Espíritu Santo» (Romanos 14:17)

Esto quiere decir que el Reino de Dios es Jesús en los corazones de las personas, que junto al Espíritu Santo podrán llevar el mensaje de salvación a las personas, permitiendo de esa forma vivir el reino de Dios en sus vidas, y al no tenerlo se le es quitado como lo dice la Palabra:

«Por tanto os digo, que el reino de Dios será quitado de vosotros, y será dado a gente que produzca los frutos de él» (Mateo 21:43)

Esto quiere decir de qué al rechazar a Jesús en sus vidas estaban desechando el reino de Dios y en varias ocasiones Jesús repite esta frase, hasta el punto que la usó al enviar a predicar a sus discípulos, pregonando amor, sanidad, misericordia, liberación para las vidas de las personas.

«Y los envió a predicar el Reino de Dios, y a sanar a los enfermos» (Lucas 9:2)

Y su Justicia

Cuando se habla de la justicia, es un término que se refiere a tener una posición recta, ecuánime, mantener un comportamiento adecuado según la norma ética establecida, es decir a cumplir el aspecto legal que rige un lugar o gobierno.

Al buscar esa justicia a la que se refiere Jesús, es hacer lo que es justo ante Dios, hacer lo que el Padre les pide, cumpliendo su voluntad. Eso es determinarse en poner a Dios como el primero en su vida, siendo su guía absoluto en cada caso que emprendan.

Ante esto Jesús refuerza en lo importante de obedecer lo que dice las Sagradas Escrituras, ya que allí está la fuente de la verdadera justicia. Es despojarse del pecado que lo impulsa en hablar y caminar en injusticia y desobediencia.

La justicia que desea Jesús que busquen los creyentes es hacer el bien, lo que es justo y cumplir con los mandamientos de Dios, para poder llevar ese Reino de forma digna.

«Porque Jehová es justo, y ama la justicia; El hombre recto mirará su rostro» (Salmos 11:7)

Y todas estas cosas os serán añadidas

Al cumplir cada una de las cosas que Jesús determina que se busque de forma primordial, se suplirá la necesidad que una persona puede tener, desde el aspecto espiritual como el material.

Cuando Jesús habla en las añadiduras que recibirán, es tener la experiencia de ser equipado por Dios en cada una de las áreas de la vida, siendo ese proveedor por excelencia en cada ámbito.

«Jehová no dejará padecer hambre al justo; mas la iniquidad lanzará a los impíos» (Proverbios 10:3)

Jesús enseña a todos para que encuentren en el Reino de Dios y su justicia la bondad y el poder de Dios, es encontrar la fuente de todas las cosas, permitiendo que su fe sea fortalecida en Dios, a quien recurrirán de manera confiada a su presencia y salvación.

«Echando toda vuestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de vosotros» (1ra. Pedro 5:7)

«Sean vuestras costumbres sin avaricia, contentos con lo que tenéis ahora; porque él dijo: No te desampararé, ni te dejaré; de manera que podemos decir confiadamente: El Señor es mi ayudador; no temeré lo que me pueda hacer el hombre» (Hebreos 13:5-6)

Dios desea que las personas cumplan sus mandatos y actúen como verdaderos hijos de Dios, que puedan recibir todo lo que necesiten y de esa forma seguir la obra que ha sido encomendada a cada uno en la tierra.

«Y poderoso es Dios para hacer que abunde en vosotros toda gracia, a fin de que, teniendo siempre en todas las cosas todo lo suficiente, abundéis para toda buena obra» (2da. Corintios 9:8)

Cómo acercarse al Reino de Dios y su Justicia

Mas Buscad Primeramente el Reino de Dios y su Justicia

Para poder acercarse al Reino de Dios y su justicia es recibir en su vida a Jesús, nacer de nuevo en el Espíritu, dejar a un lado la vida antigua de desobediencia, y permitir ser transformado por el Poder de Dios, y así entrar a ese reino prometido.

«De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de agua y del Espíritu, no puede entrar en el Reino de Dios» (Juan 3:5)

Es cumplir los mandatos de Dios y convertirse en embajadores del reino de Dios, y a través de sus frutos llevar a cabo la obra redentora, hasta recibir el reino que se establecerá de forma eterna, donde podrán reinar junto a Jesús.

«Y si hijos, también herederos; herederos de Dios y coherederos con Cristo, si es que padecemos juntamente con él, para que juntamente con él seamos glorificados» (Romanos 8:17)

«Y nos has hecho para nuestro Dios reyes y sacerdotes, y reinaremos sobre la tierra» (Apocalipsis 5:10)

Esto se puede lograr al desarrollar esa fe a Dios, alimentarse de lo que viene del cielo, permitir a través de la oración, el ayuno el estudio de las Sagradas Escrituras conocer lo que es correcto delante de Dios y ponerlo en obra.

«Ni tampoco presentéis vuestros miembros al pecado como instrumentos de iniquidad, sino presentaos vosotros mismos a Dios como vivos de entre los muertos, y vuestros miembros a Dios como instrumentos de justicia» (Romanos 6:13)

«Y si el Espíritu de aquel que levantó de los muertos a Jesús mora en vosotros, el que levantó de los muertos a Cristo Jesús vivificará también vuestros cuerpos mortales por su Espíritu que mora en vosotros» (Romanos 8:11)

Se puede culminar diciendo que al buscar primeramente el reino de Dios y su Justicia se cumplirá la Palabra de Dios en la vida de las personas, donde verán cumplidas las promesas que Él ha designado para cada uno de los que creen en su nombre.

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Por eso lo invitamos a que a diario busque de la presencia de Dios, y de esa manera poder conocer ese Reino y Justicia al que está llamando Jesús que busquen con todo el corazón.

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